jueves, 12 de enero de 2012

El mismo problema

No pudo ser. De nuevo otro error en un pase en profundidad nos deja con sabor amargo.
El error de cada partido y que al equipo le cuesta un mundo hacer gol. En situaciones normales el equipo hubiese tenido la eliminatoria muy encarrilada en los primeros 45 minutos, pero se llega y no hay nadie capaz de meterla entre los tres palos.
Por contra el Valencia ha colado una de las escasas que ha tenido y ha dejado patente la importancia de marcar en campo contrario. El equipo de Emery sigue adelante por el valor doble de los goles.
Pues a pensar en la liga única y exclusivamente. El Sábado a intentar romper la racha negativa frente al Español donde espero se repita el mismo planteamiento, pero sobre todo se tenga mas acierto de cara a puerta.
El de hoy es el típico encuentro donde si se hubiese acertado con alguna de las tantas ocasiones generadas estaríamos hablando de partidazo y baño, pero amigo mío, el fútbol son solo resultados y todo lo demás es mentira.
En lo positivo creo que el equipo va mostrando mas nivel, con llegadas, con una presión que me recordaba a lo que se vió en pretemporada y que por arte de mágia desapareció cuando cambiamos las balas de fogeo por las de guerra.
Dicen que el gol es cuestión de rachas, pues haber si de una vez por todas cambia la suerte por que los puntos se van y las eliminatorias se pierden como las de hoy.

2 comentarios:

juanderamosya dijo...

Rafa yo sere un iluminado pero de verdad te digo que a ti te gustara que llegen 10veces, o 20 o 1000!perfecto, pero desde mi modesta opinion este equipo esta para pelear el 5º o 6º puesto pero sin partidos de por medio.YO SOLO PIDO GANAR.y volvemos a pensar como en el pasado.temporada cumplida si quedamos por encima del otro equipito.un abrazo

DragosSur dijo...

No sé por qué pero últimamente Negredo me está recordando los últimos días de Luis Fabiano, apático, descolocado, blando, no sé si necesita un banquillazo o dos collejas y otras dos para Marcelino, a ver cuando suelta un taco o le da ese puñetazo que le daba Caparrós a los suyos cuando salían al campo.
Nosotros a lo nuestro, animar, a fin de cuentas ellos se van y nosotros nos quedamos.
Un abrazo.