viernes, 16 de mayo de 2014

El puto @jeitit

Para que un equipo consiga un título deben juntarse unos cuantos factores. Una plantilla de calidad, un entrenador que sepa sacar el máximo rendimiento a dicha plantilla, un poco de suerte en los momentos complicados y también, para mi lo mas importante, mucha fe en lo que tienes por delante.
Me remonto a la noche en la que el eterno inferior nos endosa un 0-2 que parecía definitivo en nuestro camino a conseguir que nuestra copa retornase a donde mas le gusta estar. Aquella noche llegaron a mi por casualidad las reflexiones de un sevillista que consiguió que todo el sevillismo viese con claridad que esta copa era nuestra.
Esa arenga sincera al sevillismo tuvo un efecto demoledor que hizo que nadie dudase de una remontada en territorio comanche. Ese hombre es @jeitit.
He de decir que no tengo el gusto de conocer al señor en cuestión. He de reconocer que un día fui seguidor suyo en Twitter, pero que algún que otro tuit, demasiado sangrante bajo mi punto de vista, hicieron que desistiera de la idea. Pero he de reconocer que este tío consiguió un efecto en cadena que podría asegurar que lo mismo que existen los "hijos de Schinlerd" en aquella grada del mediostadium había muchos "hijos de Jeitit" que llegaron allí atraídos por la tremenda fe que rebosaban sus mensajes.
Yo se que Beto paró dos penaltis, que Rakitic fue premiado como el mejor jugador de la final y que Gameiro marcó en penalti que trajo la plata a la ciudad, pero dejadme que reconozca, y a la vez tenga mi ración del "yo ya lo dije" reconociendo la labor de este señor, haciendo referencia a que está demostrado que cuando estámos junto no hay quien nos pare, y que le de las gracias porque considero que mucha culpa de lo de hoy la tienen esos comentarios vertidos en esa red social. El "puto" Jeitit consiguió en mi un estado de engorilamiento que tuve claro que seríamos campeones.
La fe es muy contagioda y puede con todo.

jueves, 15 de mayo de 2014

¿Y quien duerme ahora?

Podría escribir mil cosas, pero son tantos y tantos los pensamientos que se agolpan en mi mente que no se ni por donde empezar.
Otra vez está con nosotros, nuestra copa, la que nos cambió la vida.
Muchos recuerdos vinieron a mi mente cuando el penalti de Gameiro preñó la portería del Benfica (siempre me gustó esa expresión que usó Jesús Alvarado en el post de Glasgow).
Mañana, o pasado, quizás me extienda mas. Hoy permitidme que solo deje aquí un FELICIDADES y un recuerdo a todos esos grandes sevillistas que se nos marcharon y que a buen seguro han disfrutado de lo lindo desde el tercer anillo.
Nuestra copa ha vuelto.
¡QUE GRANDE ERES SEVILLA, QUE GRANDE ERES!

martes, 13 de mayo de 2014

No pienso escribir

Llevo algunos días dando vueltas al coco y he llegado a la conclusión de que no pienso escribir nada en esta previa.
Para sentarte delante del teclado y enfrentarte a la página en blanco debes estar inspirado, y yo, con estos nervios que tengo encima no estoy pa na.
Estoy nervioso y no es por la final en si, que también, porque gracias a Dios uno se ha curtido mucho en estas batallas en los últimos años, y porque yo confio ciegamente en los míos. Y los míos son los que salten al césped y los que no lo hagan, pero también los que vayan a dejarse la garganta en la grada y los que se la dejen desde cualquier parte del mundo, ya sea frente al televisor o junto a una radio. Como se que esos, los míos, no van a fallarme se que cuando el colegiado pite el final del partido yo estaré orgulloso de ser sevillista pase lo que pase.
Estoy nervioso porque me acuerdo de muchos a los que me gustaría dedicarle este momento. Me gustaría poder dedicarselo a mi padre, que me hizo sevillista, a mi hermano, ese que se que quedó sin bocadillo porque se gastó el dinero en una bandera del Sevilla FC para su hermano chico. Me acuerdo de mi hermana, la que siempre está apoyando pase lo que pase. Me acuerdo de mis sobrino, de mis hijos.
Yo tengo muy claro que esto es fútbol y que en una final puede pasar de todo, pero hay tanta gente a las que me gustaría dedicarle una victoria...
Me acuerdo de mi amigo Fali, de Javi Quequeno, de Giulio, de Agustín, de todos aquellos que estarán sentados en un palco en el tercer anillo.
Me acuerdo de todos aquellos que alguna vez me han acompañado en este camino. Los Ramon, Mayte, Marina, Carlos, Santi, Alexis, Aurora, Pedro, Tony, Raúl, Alberto, Humberto, Joan, y tantos y tantos compañeros en las alegrías y las penas.
Son tantas las personas a lad que me gustaría dedicarle una victoria que hace que los nervios me puedan y haya decidido no escribir una sola letra sobre la final.
Cuando pase todo quizás tenga ganas de escribir unas letras sobre todo lo vivido, pero ahora son tantos los nervios, tanta la ilusión por lo que tenemos por delante que espero que me perdoneis por no hacer un post como la ocasión merece.
Estamos de final, otra vez. Que grande somos, coño.

domingo, 4 de mayo de 2014

Entre amigos

A nadie se le escapa que el partido mas importante de lo que queda de temporada es el que disputaremos el próximo día 14 en Turín.
Lo vivido esta tarde sobre el césped se asemeja mas a un partido de solteros contra casados que a uno de fútbol profesional. Partido jugado durante muchas fases del encuentro andando donde muchos jugadores han notado el partido del jueves.
De todos modos hay cosas de Unai que no termino de comprender. Si el equipo estaba fundido hubiese visto mas razonable arropar mas ese centro del campo y no meter mas trabajo a Mbia. Con Iborra sancionado hubiese sido lo mas lógico meter a Carriço mas arriba y repetir la pareja de centrales. Pero Emery no rectifica ni cuando ve que le ha salido mal la jugada y que el rival es el dueño del centro del campo. La lesión de Vitolo pudo ser aprovechada para volver a colocar al equipo pero se optó por seguir con el mismo dibujo y el mismo resultado.
Menos mal que hacía calor y la tarde no estaba para tomar café, por lo que a Marcelino no se le iluminó la luz y no ha sabido sacar provecho de la situación.
Al final un punto que sabe a poco en la carrera por asegurar la quinta plaza. Se ha pagado el esfuerzo físico y mental del pase a la final de la Europa League.
Podría pensar que mas no se le puede pedir al grupo, que sobre la final está girando todo y con la clasificación en el bolsillo para Europa estos partidos son un trámite, pero es que soy de los que piensan que muchas veces los partidos se empiezan a ganar en el encuentro anterior y haber ganado hoy nos hubiese convertido en imparables, como lo hizo aquel gol de Rodri en Almería antes de la final del Camp Nou.
Habrá que pensar que jugando andando, haciendo un partido entre amigos, y tras jugar el jueves se ha empatado frente al septimo de la liga.
Queda poner la guinda. Sevilla, échale huevos.

viernes, 2 de mayo de 2014

Quillo, marcamos en el 93

He tenído que dejar pasar algunas horas porque estas cosas hay que asimilarlas.
Para un tío al que le guste analizar cada detalle del partido, los tiempos de posesión, las llegadas al área, o los saques de esquina a favor y en contra el partido, hablando en sevillista habrá sido un desastre. Pero para un tío como yo, que de fútbol entiendo lo justo, pasar como se hizo ayer puede ser lo mas parecido a la victoria perfecta. Es mas, quizás un 0-5 no hubiese significado en mi un estado de euforia tan grande como el que tenía ayer a las once de la noche.
Dicen que el que avisa no es traidor y el "dicen que nunca se rinde" lo llevamos por bandera y grabado a fuego hasta en el himno que esculpiera Javier Labandon. El que quiera vender la piel antes de cazarnos es su problema. Antes le pasò a las creaturitas y ayer a Albelda, que cinco segundos antes de marcar Mbia decía en una emisora de radio que nunca viò peligrar la eliminatoria. Ea, po toma.
Ahora si quieren que hablen de justicia, que sigan hablando del gol de Mbia en el Sánchez-Pizjuán mientras olvidan el claro penalti que se fue al limbo en el mismo partido. Nosotros nos vamos a Turín y los demás que sigan llorando. Nosotros nos vamos a Turín sin el apoyo de nadie, con otra retransmisión vergonzosa de la gente de Cuatro, donde pareciamos que eramos el equipo extranjero.
Bueno, sin el apoyo de nadie no, que nosotros somos el Sevilla FC, el GRANDE de Andalucía, y no necesitamos apoyos de nadie para ser lo que somos. Nos bastamos nosotros y quizás sea eso lo que mas duela. Que una panda de "Yonkis y Gitanos" sean capaces de silenciar estadios, de conseguir 6000 entradas mas de las que habían puesto a su disposición, de demostrar un amor a unos colores como ninguna otra afición ha sido capaz. Porque nuestros guardianes no solo han estado en los momentos buenos, mas de 4000 estuvieron en Oviedo y mas de 41000 en nuestro templo cuando el descenso era un hecho y nos enfrentábamos al Español.
Nosotros somos el Sevilla FC.
Seguramente para el que envidia nuestro sentimiento fue demasiado cruel, como aquel gol de Palop cuando todos nos daban por muerto y festejaban nuestra derrota. Apostaría a que el primer cohete que sonó fue de un resentido al que no le diò tiempo a apagar la mecha. Es que fue en el último suspiro, en la última jugada.
Debí haber hecho caso a mi hermano Santi Ramos (mas conocido en el blog como "el boca") cuando desde la semana pasada, y en algún whatsapp cuando mas cuesta arriba estaba todo, me aseguraba que marcábamos en el 93 de partido. Pero no, no hice caso y quizás por eso, por ver todo perdido, la alegría fue tan grande que los cimientos de mi casa temblaron.
Me acordé de mi papá, al que llamé. Me acordé de mis hermanos. Me acordé de mis amigos Fali, Giulio y Quequeno que estarían disfrutando en el tercer anillo. Me acordé del papá de mi amigo Joan, que viajó con él a Mestalla. Me acordé de mis amigos, y de toda esa gente que estaba en Valencia y a los que me hubiese gustado dar las gracias uno a uno por dejarse la garganta por mi.
A veces el fútbol compensa injusticias y ayer nos cobramos tanto ataque hacia nuestra entidad. A veces, aunque cueste, hay que hacer caso al que siente el viento de cara y te tranquiliza con un "Quillo, marcamos en el 93'