Si te cuentan que caí

Si te cuentan que caí quiero que sepas que lo hice luchando hasta el final.
Hoy de nuevo tendré que someterme al tratamiento que esta maldita dolencia me obliga. Hoy de nuevo volveré a ponerme frente a frente a mi destino, miraré a los ojos al mismo miedo y le diré que apriete los dientes porque no pienso hincar la rodilla en tierra.
A las 18:00 horas tendré que abandonar mi puesto de trabajo y dirigirme con paso firme hacia mi destino.
No me pidais que os explique mi dolencia, no quiero agobiar a nadie ni que nadie sienta pena por mi. De hecho no le llevo a mi empresa el justificante médico, no quiero ser un martir.
Solo os pido una oración por mi, para que los efectos de la rehabilitación a la que seré sometido esta tarde no me deje las secuelas habituales mañana. Que el dolor de garganta y cabeza, el olor a alcohol o esa maldita moléstia en el codo por ejercitarlo durante dos horas durante la cura sean lo mas llevaderos posible.
Un último favor, si me ves en alguna "clínica" pendiente de un monitor no se lo digas a mi jefe, no quiero que se preocupe.
Mi destino me espera, no llores por mi.